TOLEDO
Ponemos rumbo a Tembleque, en la provincia de Toledo, para conocer la historia que esconde su singular Plaza Mayor.
Es el momento más que perfecto para poner rumbo a la provincia de Toledo, concretamente a Tembleque. Allí encontramos uno de los rincones más espectaculares tanto de la comunidad castellanomanchega como del país. Estamos hablando, cómo no, de su Plaza Mayor.
Se trata, indudablemente, de una de las plazas más singulares y reconocibles de España. Por ese mismo motivo, en febrero de 1973, fue declarada Bien de Interés Cultural. Estamos, sin lugar a dudas, ante un rincón realmente especial que no deja absolutamente indiferente a nadie.
La Plaza Mayor de Tembleque, a través de su historia
Es del siglo XVII y fue diseñada, principalmente, para cumplir una doble función: por un lado, para actividad social de los vecinos de Tembleque y, por otro, para ser utilizada como plaza de toros. Es más, una de sus tres puertas era el callejón de toriles.
Un hecho a destacar de la historia de la Plaza Mayor de Tembleque, cuya construcción se finalizó en 1598, nos hace viajar a 1624, cuando se celebraron unos festejos taurinos a los que asistieron tanto el Rey Felipe IV como Quevedo. Muchos son los que, por tanto, creen que en ese año se inauguró esta singular plaza, como la conocemos en la actualidad.
El pasado taurino de esta plaza queda reflejado en numerosos elementos, pero especialmente en los balcones. Lejos de hacerlos independientes, quisieron incorporarlos a las fachadas. Esto provocó que tuviera el aspecto tan curioso y característico que tanto llama la atención a habitantes y turistas.
En cuanto a la parte inferior de esta Plaza, encontramos diversos soportales sostenidos por columnas toscanas. Están realizadas en granito sobre zapatas de madera. Cabe destacar que, en los accesos, encontramos otro tipo de columnas, con pilares de sección cuadrangular.
En el Torreón se situaba el palco de autoridades en los festejos taurinos. El último que se celebró en esta Plaza de Tembleque fue en 1987. Como dato a destacar, a uno de los lados de este lugar tan singular, podemos encontrar el Ayuntamiento de la localidad que fue construido en el año 1654.