DETECTAN VARIAS INFRACCIONES
La Dirección General de Tráfico cuenta con 1.324 radares distribuidos por las carreteras españolas y entre ellos encontramos unos especialmente eficaces: los multicarril.
Controlar los excesos de velocidad es, desde hace tiempo, uno de los frentes de acción de la Dirección General de Tráfico (DGT). Una batalla para la que cuenta con un buen despliegue de armas entre las que se encuentran los diferentes tipos de cinemómetros… que van más allá de los fijos y los móviles. Así funcionan los radares multicarril.
Hace unos días, la DGT informó que su plantilla de radares y drones crecerá en 2021. Estos últimos darán la bienvenida a 28 nuevos dispositivos de vigilancia que se unirán a los once que ya tiene en su poder. En cuanto a los primeros, se instalarán 75 cinemómetros nuevos ampliando los 1.324 que la DGT ya tiene distribuidos por las carreteras españolas para su vigilancia.
Así funcionan los radares multicarril
Puede que entre ellos se encuentren los radares multicarril, unos dispositivos de vigilancia que nos encontramos dentro de los fijos. No necesitan el control directo de un operador o de un agente, razón por la que son los que se instalan en los pórticos, en los postes y en los márgenes de las carreteras.
Es ahí donde encontramos esas cabinas ubicadas en el arcén y en cuyo interior pueden albergar radares que son capaces de controlar entre cuatro y seis carriles, en la misma dirección o en las dos. Estos dispositivos se encuentran entre los más eficaces ya que establecen una triangulación de la señal. O lo que es lo mismo: si aparecen varios vehículos en una misma foto pueden especificar cuál es el que ha excedido los límites de velocidad.
Más infracciones
Además de estar diseñados para identificar con precisión a los coches que no circulan a una velocidad superior a la permitida, los radares multicarril pueden detectar otras infracciones. Están capacitados para llevar a cabo un exhaustivo reconocimiento que pasa por averiguar si el vehículo ha pasado la ITV o si tiene el seguro en vigor.
Y por si todo esto fuera poco, estos cinemómetros emiten ondas de alta frecuencia a baja potencia para que los detectores no puedan alertar sobre ellos y funcionan de igual manera tanto de día como de noche. En ausencia de luz natural, lleva a cabo las mediciones utilizando un flash con gestión inteligente que reconoce las condiciones lumínicas cuando un vehículo pasa junto a él. En ese momento, registra la información en una pantalla que está dentro de la cabina o del coche en el que está ubicado.