Basílica de Nuestra Señora de la Paz de Yamusukro, conocida como la Basílica de San Pedro de África

Es el momento más que perfecto para poner rumbo a Yamusukro, situado en Costa de Marfil. Allí encontramos una de las edificaciones religiosas más impresionantes de todo el mundo. Estamos hablando, cómo no, de la Basílica de Nuestra Señora de la Paz. Una construcción que erigió Pierre Fakhoury, inspirándose en la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano. De ahí que se conozca popularmente como la Basílica de San Pedro de África.

Una de las peculiaridades de esta construcción es que estamos ante uno de los templos católicos más grandes de todo el planeta. Otro dato curioso es que, a pesar de ese gran tamaño, se trata de una basílica y no de una catedral. Y es que es la Catedral de San Agustín el lugar principal de culto de la ciudad de Yamusukro.

La Basílica de Nuestra Señora de la Paz de Yamusukro, a través de su historia

Para conocer el origen de esta construcción debemos fijarnos en una figura, la de Félix Houphouët-Boigny, presidente de Costa de Marfil. Él fue quien, con su dinero, pagó los 300 millones de dólares que costaron las obras de esta basílica. La primera piedra se colocó en febrero de 1986, y las obras no finalizaron hasta tres años después.

Debemos tener en cuenta que, en un principio, la Santa Sede llegó a negarse a aceptarla. Y todo por ser tremendamente ostentosa. A pesar de todo, debido a la presión de los obispos locales, se vio en la obligación de aceptarla, aunque con ciertas condiciones. Entre ellas, que cerca de la Basílica se construyera un hospital para los más necesitados.

Lejos de que todo quede ahí, también se pidió que se construyera una Universidad Católica. Una vez se firmó el acuerdo, lo cierto es que tan solo se pusieron unas primeras piedras, con la promesa del gobierno de Costa de Marfil de la conclusión de las obras. ¡Pero nada más lejos de la realidad!

Una fecha importante en la historia de la Basílica de Nuestra Señora de la Paz de Yamusukro es el 10 de septiembre de 1990. En ese momento, el Papa Juan Pablo II la consagró. En la actualidad, esta edificación es propiedad de la Santa Sede, pero es administrada por los llamados Palotinos polacos.

La Basílica de Nuestra Señora de la Paz de Yamusukro, a través de sus características

Para comenzar, debemos hablar de la impresionante cúpula de esta Basílica. No solamente cuenta con 158 metros de altura, sino que puede albergar a unos 18.000 fieles en el interior y hasta 300.000 en la explanada que podemos encontrar en el exterior. Está construida en mármol y tiene unas dimensiones de 195 metros de largo por 150 metros de ancho. Con estos datos, ya podemos hacernos una ligera idea lo inmensa que es.

Tanto es así que, junto a la Basílica de San Pedro, la Basílica de Nuestra Señora Aparecida y la Mezquita-Catedral de Córdoba, estamos ante una de las construcciones religiosas más grandes de todo el planeta. Uno de los datos más curiosos de esta Basílica es el motivo por el que la fachada está orientada hacia el noroeste. Y todo porque es la dirección en la que se encuentra la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano. ¡Muy curioso!