CADA VEZ MÁS RESTRINGIDOS
Las etiquetas ambientales son ya conocidas por todos los conductores, etiquetas que cada vez tienen más consecuencias para los vehículos más antiguos y contaminantes. Ahora, la primera comunidad que prohibirá la circulación a los vehículos con etiqueta B se ha pronunciado, poniendo fecha a las restricciones
Las etiquetas ambientales son una herramienta fundamental en la lucha contra la contaminación y el cambio climático. Estas etiquetas, introducidas por la Dirección General de Tráfico (DGT) en España, clasifican a los vehículos según su impacto ambiental, promoviendo el uso de coches más limpios y eficientes. La clasificación incluye las etiquetas CERO, ECO, C y B, asignadas en función de las características del vehículo, como el tipo de combustible y su nivel de emisiones.
Así, la etiqueta CERO se asigna a los vehículos eléctricos y algunos híbridos enchufables (los de más de 40 km de autonomía eléctrica) que no emiten contaminantes mientras están en modo eléctrico. La etiqueta ECO corresponde a vehículos híbridos y aquellos propulsados por gas natural o GLP, que tienen un menor impacto ambiental. La etiqueta C se otorga a vehículos de gasolina matriculados a partir de 2006 y diésel desde 2014, mientras que la etiqueta B se aplica a coches de gasolina matriculados a partir de 2000 y diésel desde 2006, que cumplen con normativas europeas anteriores.
Las ciudades y comunidades autónomas en España están implementando restricciones cada vez más estrictas para reducir la contaminación del aire, medidas que afectan especialmente a los vehículos más antiguos y contaminantes, con el objetivo de mejorar la calidad del aire y cumplir con las normativas europeas.
Cataluña, en particular, ha sido pionera en la aplicación de estas restricciones. En 2020, la región introdujo Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en Barcelona, limitando el acceso a los vehículos sin etiqueta ambiental en días laborables. Esta medida ha demostrado ser efectiva, reduciendo significativamente los niveles de NO2 y otros contaminantes, aunque sin duda ha supuesto un quebradero de cabeza para muchos conductores, que han visto como ya no podían entrar con sus vehículos en las zonas céntricas de la ciudad condal.
A partir del 1 de enero de 2026, Cataluña implementará una nueva restricción que afectará a los vehículos con etiqueta B. Estos vehículos, que incluyen coches de gasolina matriculados entre 2000 y 2005 y diésel entre 2006 y 2013, no podrán circular en las Zonas de Bajas Emisiones de la región. Esta medida es parte del compromiso de Cataluña para alcanzar los objetivos de calidad del aire y reducir las emisiones de CO2.